El estreno de la polémica camiseta se vio postergado este domingo próximo ante Rosario Central, de local, ya que la AFA le advirtió a Boca que no podrá hacerlo ya que su atuendo alternativo combinaba con un pantalón similar al de su rival.
En paralelo, un mensaje anónimo apareció en un paredón del club: “Dirigentes: Si usamos la rosa, el partido no se juega. Boca es azul y oro”.
“La camiseta rosa siempre fue resistida pero se agotó”, expresó Angelici con el afán de marcar una contradicción en la preferencia de los hinchas.
A su criterio, el culebrón por la camiseta se produjo porque “Boca vende y todo se convierte en grande por más chiquito que sea”.