Cuando comes en la oficina y llevas tus viandas, quizá en alguna ocasión has envidiado los almuerzos de tus compañeros, pero ¿cómo consiguen algunos preparar las comidas tan bien? Pues tenemos las 30 mejores recetas para llevar en tupper a tu trabajo y comer de forma saludable.
La preparación de comidas ha sido durante mucho tiempo la forma en que los profesionales del fitness han una alimentación sana, pero la cocina de aprovechamiento con recetas para cocinar con sobras también es tendencia. Antes, la comida de tupper se asociaba a comidas empapadas en aceite o con mal aspecto, pero ahora sabemos que la preparación de comidas mejora el equilibrio de la alimentación semanal, ayuda a organizar mejor las tareas de casa, ahorrar tiempo y dinero.
LOS 6 ERRORES QUE DEBES EVITAR CON LA COMIDA EN TUPPER
Aunque lleves años llevando tus recetas caseras al trabajo, seguro que no te has fijado en algunos detalles que pueden echar a perder tu menú diario en la oficina.
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1. UTILIZAR TUPPER DE PLÁSTICO DE BAJA CALIDAD
Cuando llegues al trabajo con la mejor salsa de yogur para las crudités vertida en tu bolso vas a entender de qué te hablamos. Lo barato, a veces, sale caro, así que compra recipientes con un cierre hermético para poder llevar al trabajo la mejor receta de purés y crema fría o una buena ensalada de otoño fácil de preparar sin que se escape ni una gota ni huela a nada. Lo ideal es que busques algunos con cierre de clip para evitar fugas y derrames.
2. PREPARAR DEMASIADA CANTIDAD DE COMIDA
Es fácil entusiasmarse con la idea de organizarse por fin y ser la persona que da envidia a todo el mundo a la hora de comer en la oficina. Pero hay que saber calcular, porque siempre surgen cenas o comidas por sorpresa o un almuerzo de trabajo que dejará tu tupper más tiempo del que pensabas en la nevera.
Si preparas mucha comida, aprovecha el congelador. Cuando decidas comer por lotes, por ejemplo, los platos de cuchara con potajes de legumbres, quizá es mejor que congeles una parte y si se trata de carne o pescado, cocina cada tres días en lugar de intentar hacerlo todo a la vez.
3. APRENDER A COCINAR ACOMPAÑAMIENTOS Y GUARNICIONES
La clave está en ir poco a poco. En lugar de preparar comidas completas, puedes empezar con ingredientes que combinen con alimentos básicos, así que prepara legumbres, arroz blanco, quinoa o pasta, porque tienen muchas propiedades y son un excelente acompañamiento para consumir en frío o en caliente. Por ejemplo, una opción fácil para el almuerzo es una lata de atún con quinoa, aguacate y judías verdes. Lo único que tienes que preparar es la quinoa, luego puedes abrir la lata de judías y cortar el aguacate ese mismo día.
4. SABER ORGANIZAR COMIDAS PARA TODA LA SEMANA CON BATCH COOKING
A algunas personas no les importa comer lo mismo para el almuerzo y la cena, pero para la mayoría es algo aburrido, por eso te animamos a practicar el batch cooking en la cocina. De nuevo, te recomendamos hacer sitio en el congelador. Prepara lo suficiente para cinco, ocho o incluso diez raciones (si tienes un arcón para congelar), pero a la hora de planificar los menús con recetas saludables, incluso si cocinas con airfryer, piensa en el conjunto de la semana. La comida es vida; quieres disfrutarla. A las personas a las que les cuesta repetir les puede resultar más fácil cocinar pequeñas cantidades en días alternos en lugar de una gran sesión dominical. Se trata de encontrar lo que funciona para ti. Prueba a cocinar una proteína, como filetes de pollo o salmón, y ve mezclando los cereales. Las bolsitas de arroz para microondas son una forma sana y fácil de añadir un poco más de sabor.
5. CÓMO CONDIMENTAR BIEN LA COMIDA
No esperarías comer cuscús normal con calabaza asada normal y pollo normal en tu restaurante saludable favorito. Así que, antes de empezar a lamentarte de que tus almuerzos saludables son aburridos e insípidos, echa mano de la sal y la pimienta, hazte amigo de tu especiero, utiliza las hierbas aromáticas de tu minihuerto DIY en la cocina o pica una guindilla. Lo mismo vale para los aliños o las salsas.
6. EVITAR EL EXCESO DE ACEITE EN LOS TUPPERS
La otra cara de la moneda de los condimentos son las recetas que chorrean aceite. Por ejemplo, la receta casera de escalivada puede llevar un chorrito de aceite de oliva que complica su transporte, a cambio es muy saludable. También es complicado llevar un tupper con pollo asado en casa a la oficina, porque cuando la grasa se queda fría y si no tienes microondas en el trabajo puede ser un problema.
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