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Los productores vitivinícolas pedirán ayuda al Gobierno nacional

Ante la baja de las ventas, la Unión Vitivinícola evalúa presentar un petitorio que incluye diferentes puntos para mejorar la competitividad.

El sector vitivinícola viene atravesando un mal momento. Es que, a pesar de que subió el precio del vino y ya no sobra, como hace dos años, ahora el problema es que no se vende.
La crisis del consumo, extendida a todas las actividades y el encarecimiento de los precios del vino golpeó las ventas.
Por eso los bodegueros anunciaron que le pedirán al Gobierno nacional un trato preferencial, condiciones diferentes para que la industria del vino subsista en este mal momento.
Se trata de una serie de ventajas que han calificado como "un acuerdo de competitividad".

Así lo confirmó José Pepe Zuccardi, presidente de la UVA (Unión Vitivinícola Argentina) y uno de los principales referentes del sector exportador de vinos.
"La caída del consumo nacional tiene mucho que ver con la caída que hay en todos los productos. Nadie puede negar que hay un proceso de ajuste en donde el poder de compra se redujo y el vino está sufriendo en la misma medida que las demás bebidas. Pero en la vitivinicultura se da una situación particular. Con dos cosechas malas que redujeron los stocks se generó un aumento del precio del vino por encima de los altos valores inflacionarios, lo que agudizó el problema del consumo", explicó José Zuccardi a Radio Nihuil de Mendoza.

En este deprimido clima de negocios y demandas urgentes, hoy arranca en nuestra provincia la Semana del Malbec, que busca promocionar el vino insignia de Mendoza y de la Argentina.
Una semana plagada de actividades turísticas, de consumo y marketing que ya hizo su primera etapa en los últimos siete días en Buenos Aires.
Los bodegueros mientras tanto preparan su listado de demandas para llevar al Casa Rosada y al Congreso de la Nación.



Los puntos que quieren debatir
Estos se centran en tres ejes: las retenciones a las exportaciones, las cargas laborales y los impuestos a los combustibles.

Zuccardi detalló: "El sector tiene hoy un problema serio de competitividad por eso hemos pedido a la Nación el incremento del 6 al 9% del reintegro de las retenciones a las exportación porque el tipo de cambio no nos acompaña. El peso se fortalece con un dólar que está pisado y atrasado mientras el resto de las monedas se devalúan como ocurre con el euro, lo que les da más competitividad de precios a los vinos de Europa sobre los nuestros".

Agregó: "Queremos ir más allá con un acuerdo de competitividad en el que se tenga en cuenta la disminución de las cargas laborales que en la vitivinicultura tiene alto impacto porque es una gran generadora de empleo".

Zuccardi graficó: "En la producción de uva, el 70% de los costos son de mano de obra".

Luego le apuntó a la carga impositiva de los combustibles: "La logística es muy costosa. Estamos a 1.100 kilómetros de nuestro puerto principal y de nuestro primer consumidor, que en ambos casos es Buenos Aires".

"El impuesto a los combustibles -continuó- es como tener una aduana interna porque lo que hace es generar más costos mientras se está más lejos de Buenos Aires".

El bodeguero pidió un trato diferencial respecto a la Pampa Húmeda.

"No podemos recibir el mismo trato quienes cultivamos en zonas donde sólo el trabajo y el aporte energético permite transformar el esfuerzo en producción, que la Pampa Húmeda la que tiene beneficios naturales en la tierra que la hacen altamente efectiva".
Fuente: Alejandro Gamero / Diario Uno

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