La mayoría de los consultados se quejó por la poca frecuencia con la que llegan los micros. Un usuario aseguró que en los colectivos de las 7 de la mañana los choferes pueden "meter" hasta 50 personas en el vehículo, en tanto que luego van mermando la frecuencia para dejar menos unidades en la calle. Recién a la salida de escuelas y comercio vuelven a aumentar la frecuencia que resulta insuficiente porque los colectivos vuelven a estar atestados. Un problema aparte es el de los usuarios de la SUBE, es que mucha gente se queja porque no consiguen dónde recargarle el crédito y terminan pagando con efectivo. Los que abonan con efectivo tampoco la pasan bien ya que si no lo hacen con los $6,75, el chofer suele quedarse con su vuelto y se cobra directamente entre 7 y 8 pesos.