Los ladrones los obligaron a abordar los vehículos y les pidieron dinero. "Frené y vi sospechosos en una camioneta que me estaba siguiendo. Intenté dar marcha atrás por instinto y me cruzaron un Bora. Ahí fue donde nos bajaron a todos. Yo pensé que me querían robar el auto, pero me tenían agarrado todo el tiempo y me asusté. Cuando agarraron a mi hijo, grité y me puse muy nervioso. Ahí me pegaron, pero luego se disculparon", contó Pablo, el papá de la familia, en el canal Todo Noticias (TN).Los secuestradores le reconocieron a Pablo que se habían equivocado de persona y que en realidad buscaban al propietario de una parrilla de la zona. "Nos trataron bien. Después me pidieron disculpas y me decían `peladito perdoná, vos sos bombero´. Nos robaron dos mil pesos y los celulares. Cuando me pegaron quedé medio volado. Les dije que solo tenía la plata de las vacaciones. Creo que todo duró una hora más o menos. Cuando escucharon la alerta policial me dijeron `quedate tranquilo que esto ya está caliente´ y nos largaron", precisó la víctima.