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Durante el acto de la UCR popular CFK dijo que están lejos del fin de un ciclo

La mandataria habló a la militancia radical kirchnerista. Celebró la detención del ex director del FMI y advirtió al PJ disidente: "No se puede ser peronista sin ser kirchnerista".

La presidenta Cristina Kirchner aseguró este jueves por la tarde que "no" le "cuesta" participar del congreso nacional del radicalismo popular y resaltó que "lejos de estar en un fin de ciclo, estamos entrando en el corazón de un nuevo ciclo político".

Durante el acto organizado por el dirigente radical Leopoldo Moreau en Parque Norte, la mandataria subrayó que "esto que está sucediendo acá y ahora, lejos de estar en un fin de ciclo, estamos entrando exactamente en el comienzo y en el corazón de un nuevo ciclo político". Y recordó que el fin de ciclo se dio en 2001.

"Estar acá no me cuesta", dijo la jefa de Estado en el acto de los radicales disidentes con la conducción de Ernesto Sanz. Y resaltó: "Vine como militante y no como Presidenta".

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Durante su larga ponencia, aseguró que en el exterior "nos miran y admiran " por la política sobre la deuda externa implementada. "Nos miran y admiran desde el mundo, cómo hicimos para desenrroscarnos de la deuda externa sin recurrir al mercado de capitales", afirmó.

En primera fila la aplaudían el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, el secretario general de Presidencia, Eduardo "Wado" De Pedro, y el diputado Andrés "Cuervo" Larroque.

Durante su discurso, Cristina Kirchner hizo referencia a la cena de empresarios y economistas que tuvo lugar hace unos días y fuera reflejada en La Nación, y aseguró -sin querer nombrar al ex ministro de Economía, Domingo Cavall- que "alguien dijo que lo necesitábamos a él y 200 como él. Algunos lo dicen, y otros piensan y no se animan a decirlo porque no los votarían".

Entre cánticos de militantes radicales kirchneristas -"Somos la vida, somos la paz. alfonsinismo en el proyecto nacional"- la Presidenta llamó a "ampliar fronteras de un movimiento nacional, popular y democrático". Y cuestionó a los empresarios que se oponen.

"Esa derecha renovada, no les doy el handicap, los conozco de hace tiempo, no estaban en política, pero se desarrollaban en el campo empresario, pero ahora han venido porque quieren al país atendido por sus propios nuevos. A la Argentina atendida por sus propios dueños, pero los que no estamos de acuerdo reivindicamos el encuentro de todos, y no pedimos ficha de afiliación. Lo que importa es tener el corazón y la cabeza puestos en Argentina", concluyó ante los aplusos radicales.

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