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De Trapito a Chiquito: River quiere a Romero y ayer le dijeron que lo llamarían

La lesión de Marcelo Barovero en la noche del lunes en Uruguay, y su salida de Núñez consumada, hace que la dirigencia de River le apunte los cañones al arquero de la Selección, arquero con quién existió un “affaire” que finalmente quedó en la nada. El misionero sabe cuál es la respuesta ahora.

Romero comenzó su carrera futbolística en “cancha grande” en la CAI (Comisión de Actividades Infantiles) de Comodoro Rivadavia, sin embargo, sus deseos con el deporte estaban centrados en divertirse y seguir los pasos de sus tres hermanos que hacían deportes como voley, el básquet y el fútbol.

En el año 2000, durante una de las giras de los juveniles de la CAI por Buenos Aires, coincidió con el viaje de la categoría 86, donde Romero por imposición de su entrenador Jorge Montesino, decidió que iba atajar dando la ventaja de un año de edad.

El resultado: la dirigencia “Millonaria” quedó encantada con el morocho de categoría 87, que sumaba a su estilo, la imponente altura que ya promediaba el 1,80.  

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Sin embargo, al momento de la charla con los encargados del fútbol juvenil del equipo de Núñez apagaron la ilusión del jovencito.

Luego el destino quiso que Independiente de Avellaneda lo quisiera, algo que no llegó a buen puerto.

“Papá hay un señor que te quiere hablar”, le dijo el joven arquero a Ramón, su padre.

Mientras el coordinador de divisiones inferiores de Independiente se presentó, Romero padre no lo dejó hablar y le cerró la chance: “Mi hijo no va a jugar en Independiente, porque nosotros somos de Racing”.

"River tiene cubierto los puestos de arquero en la categoría. Que nos dejen los datos y si pasa algo lo vamos a llamar, quedense tranquilos”

Le dijeron a Romero en Núñez 

Sin embargo, a los dos meses de ese contacto y con la promesa que otro equipo lo iba a ir a buscar, Ramón le dijo a Sergio que habría otro equipo y otra chance para irse a Buenos Aires, Sin saber que sería la “Academia” la institución que le daría el empujón definitivo en su carrera profesional.

Hoy River tiene en la órbita a ”Chiquito”, aunque según averiguó Télam, el deseo del misionero es demostrar que está apto para jugar en lo que él considera “la NBA del fútbol”, la Premier League, y jugar una temporada completa como el guardián del arco del Manchester United.