Tomos somos Roberto", apareció diciendo todo el mundo de repente en Twitter, y la pregunta obligada fue: ¿quién es Roberto? Según cuenta la historia que ya casi se convirtió en mito, Roberto es apenas un nombre que repetía una mujer en el transporte público en México. La muchacha dijo que se iba a casar con Roberto pese a que el hijo que tendrá en cinco meses no es de él, sino que el padre es el hermano de Roberto. Semejante historia (que también incluía otros amantes) despertó la curiosidad de un pasajero que escuchó atentamente todo lo que pudo hasta que tuvo que bajar en su casa. Y decidió convertirse en el justiciero de Facebook e iniciar una campaña nacional para advertirle lo que ocurría a cualquiera que se llamara Roberto, con un hermano llamado Adrián y una futura esposa embarazada de cuatro meses.
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