Por este lado del mundo, es gracioso e inofensivo (por el momento) pero en Rusia, se han suscitado hechos trágicos debido a esta práctica.
Primero, fue el caso de la joven de 17 años que se tomó una foto sentada en un puente y resbaló. Más tarde, otra chica quiso probar si su palo selfie servía para sostener el revólver de su padre y éste se disparó. Por último, dos adolescentes se electrocutaron al intentar retratarse con su móvil en el techo del tren en que viajaban.
Estos tres sucesos ocurrieron en Rusia y obligaron al gobierno ruso a tomar medidas, según informó el diario El País.
Así, y para evitar el creciente número de incidentes causados por selfies, se acaba de publicar una guía “para sacarse fotos con el móvil de manera responsable”.
“Safe self”, como se llama la guía publicada por el Ministerio del Interior ruso, está acompañada de una nota que advierte: “Cuando nos hacemos una selfie, no prestamos atención a lo que tenemos alrededor y no tenemos sensación de peligro”.
Además, con una serie de imágenes, se busca ilustrar las potenciales situaciones de peligro en las que pueden ocurrir accidentes, como las vías del tren, colgados de una antena o junto a animales salvajes.