Esta es la estación de investigación Concordia en la Antártida, una instalación franco-italiana donde hasta 16 personas viven durante un año en aislamiento completo... todo en nombre de la ciencia.
La estación Concordia es el análogo más cercano a la Tierra para las misiones espaciales a largo plazo, por lo que es el hogar de varios científicos de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). ¿Cuál es su objetivo final? Una misión tripulada a Marte.
"Al observar cómo el cuerpo humano y la mente se adapta en la Antártida, podemos planificar y predecir lo que sucedería en el espacio", dice Alex Kumar, un médico del Instituto Nacional de Investigación en Salud del Reino Unido
Kumar ha visitado la base Concordia dos veces a la fecha, tanto para la ESA como para el proyecto White Mars, y compartió sus experiencias en la reciente World Extreme Medicine Expo en Londres. Los efectos del estrés, cambios en la inmunidad y adaptación a la oscuridad solo son algunos de los retos que están explorando.
La ESA está utilizando la Concordia, y la Antártida en su conjunto, para revelar que tan bien se adaptará el cuerpo humano en su largo viaje a Marte.
Oscuridad, aislamiento y hostilidad
"La Antártida es el continente con más viento, más alto y más seco de la Tierra", dice Kumar, quien ha sentido los efectos de vivir allí tanto en su mente como en su cuerpo.
"Estás aislado del resto del mundo y, en invierno, completamente aislado ya que no llegan ni salen vuelos", añade.
"Estás tan lejos que sientes como si estuvieras ubicado en otro planeta", dice Kumar.
Fuente: cnnespanol