En la reunión del jueves 29 de septiembre, el Gobierno se comprometió a "analizar los reclamos y avanzar en las respuestas a través de la búsqueda de consenso". Héctor Daer, uno de los tres jefes de la central obrera, había dicho luego de la reunión: "No hay tregua ni fecha de paro".
Ayer, los ministros de Carolina Stanley (Desarrollo Social) y Jorge Triaca (Trabajo) blanquearon parte de la estrategia oficial para neutralizar la organización del primer paro nacional contra Macri: dijeron que el Gobierno otorgaría un extra de fin de año para beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y jubilaciones bajas.
La CGT presionará para que los beneficios de fin de año se universalicen. El consejo directivo de la central obrera se reunió el jueves: se intentó fijar un piso de $ 2000 para el bono de fin año. El triunvirato pretende un bono adicional para las actividades más golpeadas (ya que el bono en sí ya está instaurado en la mayoría de las actividades). El desafío es que el Gobierno sugiera de manera explícita a los empresarios a otorgar el plus, pero en el Gobierno consideran inviable la imposición de un bono a los privados. (La Nación).