"Por último, el tribunal desea señalar que el auxiliar, Daniel Pollack, se ha dedicado en un grado notable a la realización de sus funciones, y él lo ha hecho con gran habilidad. Sus esfuerzos, sin duda, serán de gran valor en el resolución final de este litigio. Él tiene el agradecimiento de la Corte", agregó Griesa en relación a quien fue el que terminó acercando las partes para que el juicio esté más cerca de llegar a buen puerto.Griesa no ahorra elogios hacia el presidente argentino. "La elección del presidente Macri marcó un punto de inflexión en la actitud y las acciones de la República. Desde la elección, el gobierno del presidente Macri ha declarado sistemáticamente su deseo de resolver los conflictos y volver a abrir el país a los inversores extranjeros"."Lo más importante, la República ha mostrado una disposición de buena fe para negociar con los holdouts. Bajo las administraciones argentinas anteriores, los demandantes han tenido que aceptar recortes severos en el valor de sus bonos, o bien generar infructuosos esfuerzos para adjuntar propiedad para satisfacer sus juicios", sostiene el juez marcando las diferencias entre la era K y la era Macri.Griesa afirma que aunque el tribunal no se pronuncia sobre la "razonabilidad de la propuesta de la República", "el tribunal reconoce serios esfuerzos de la República para negociar y su sorprendente cambio de actitud" con el presidente Macri."Del mismo modo que la conducta de la República en 2012 y 2015 ha influido en la decisión de la corte de emitir las medidas judiciales, por lo que también es necesario que el tribunal tenga en cuenta el actual comportamiento de la República", deja en claro Griesa.Y termina diciendo que quitando la medida que restringía al cumplimiento del pago de los bonos a la Argentina "podría servir al interés público mediante el cese de los efectos colaterales que tienen sobre terceros". "Asimismo, debe promover una amistosa resolución de conflictos de este litigio", resume Griesa.