Este episodio generó que la Justicia le otorgara una medida judicial que prohibía que el hombre se acerque a su vivienda y trabajo. No fue suficiente esta restricción perimetral porque, durante la noche del sábado, la mujer recibió una feroz golpiza que terminó con graves lesiones en su rostro.
La víctima se encontraba en la casa de una amiga que conoció en una fundación que contiene a las mujeres víctimas de violencia machista y delante de todos la golpeó hasta hacerla sangrar. La mujer logró levantarse como pudo y se dirigió hasta la Comisaría de la Mujer donde realizó una nueva la denuncia.