La única condición para que las empresas sigan cobrando la ayuda es que mantengan el personal ya que el Estado local realiza evaluaciones periódicas para comprobar que no hayan echado empleados.
La secretaria explicó que hay sectores seriamente afectados como el textil que se ha visto seriamente dañado por la apertura de las importaciones.
En el caso de la Electrometalúrgica Andina (EMA), Barceló explicó que la firma entraría dentro de la categoría de las electrointensivas y recibirá una ayuda de la Nación. Ahora se plantea otra serie de complicaciones propias del sector y las autoridades locales ya han mantenido reuniones para tratar de avanzar en soluciones.