"Decían que tenía muerte cerebral, que era un vegetal. Todos se movían demasiado rápido: el hospital, las enfermeras, los médicos", expresó el hombre al sitio Click2Houston. Pickering decidió atrincherarse con una pistola de 9 mm en el cuarto de su hijo durante tres horas el 10 de enero pasado."Yo sabía que si podía estar a solas con él unas tres o cuatro horas podría saber si estaba muerto o no", explicó el hombre. "Durante esas tres horas, George apretó mi mano cuando se lo pedí", aseguró el hombre, que fue arrestado después de que la Policía tirara abajo la puerta del cuarto.Pickering II explicó que se sentía "desesperado" después de que su ex mujer y su otro hijo autorizaran a los médicos a desconectar a su hijo. Once meses más tarde, el joven está recuperado del episodio y goza de buena salud, mientras que el padre acaba de cumplir su sentencia en una cárcel de Texas."Rompí la ley, pero fue por un buen motivo. Fue por amor", explicó el hombre. "Lo importante es que estoy vivo y bien, y que mi padre está en casa y estamos juntos de vuelta", expresó a su vez George III, quien acompañó a su progenitor en la entrevista.